Abogado en Propiedad Industrial
Nuestra firma legal Abogado en propiedad industrial ofrece sus servicios para garantizar la defensa de los derechos derivados del registro de la propiedad industrial e intelectual.
El abogado de la propiedad intelectual realiza diferentes funciones relacionadas con la defensa de los derechos derivados del registro de la propiedad industrial o intelectual.
El abogado de la propiedad intelectual tiene, los conocimientos para ejercer tanto local como internacionalmente.
El abogado de la propiedad intelectual tiene, por tanto, los conocimientos de derecho necesarios para ejercer de forma efectiva los derechos intelectuales tanto local como internacionalmente, esto es como para realizar los trámites o documentos necesarios y asesorar a las empresas y particulares sobre la mejor forma de proteger estos derechos.
Registrar y actuar como agente de la propiedad ante la Oficina de Patentes, siempre y cuando tenga el uso exigido por la normativa.
Demandar y litigar para proteger los derechos de la empresa en el caso de que sea necesario.
Acceder a las bases de datos de la OEPM para conocer que marcas o productos están ya registrados.
Otra de las labores importantes y que puede realizar un abogado de la propiedad intelectual es actuar como mediador en lo que se conoce como Métodos alternativos de solución de controversias en materia de Propiedad Intelectual.
Estos sistemas (mediación y arbitraje) permiten a las empresas llegar a acuerdos beneficiosos sin recurrir a la vía judicial.
La solicitud de uso genuino de marcas registradas se refiere
al requisito legal que exige que el titular de una marca registrada la utilice
de manera real y efectiva en el comercio para los productos o servicios
específicos que han sido protegidos en el registro. Esta obligación tiene como
objetivo garantizar que las marcas registradas cumplan su función principal,
que es distinguir los productos o servicios de una empresa de los de otros en
el mercado.
La obligación de uso genuino de marcas registradas varía
según la legislación de cada país o región, pero en general, los principios
comunes incluyen:
Uso efectivo y continuo: El titular de la marca debe
utilizarla en el comercio de manera efectiva y continua, lo que significa que
debe haber una actividad comercial real asociada con la marca y no un uso
meramente simbólico o nominal.
Uso en los productos o servicios protegidos: La marca debe
utilizarse en relación con los productos o servicios específicos que se
encuentran protegidos en el registro. El titular no puede utilizar la marca
para otras categorías de productos o servicios que no hayan sido incluidas en
el registro.
Mantenimiento de la calidad: El titular de la marca debe
garantizar que los productos o servicios identificados por la marca mantengan
la calidad y características que han sido asociados con la marca.
Ausencia de interrupción injustificada: No puede haber interrupciones
injustificadas en el uso de la marca durante el período de protección.
Cumplimiento de los plazos de no uso: En algunos países, si
el titular de la marca no utiliza la marca de manera efectiva durante un
período determinado (generalmente entre 3 a 5 años), la marca puede estar
sujeta a cancelación o caducidad.
El incumplimiento de la obligación de uso genuino puede
tener consecuencias legales y puede hacer que la marca pierda su protección o
sea vulnerable a disputas legales por parte de terceros. Por lo tanto, es
esencial que los titulares de marcas registradas se aseguren de cumplir con los
requisitos de uso establecidos por la ley para mantener la protección efectiva
de su marca en el mercado.
Si el titular de una marca enfrenta dificultades para
cumplir con la obligación de uso genuino debido a circunstancias excepcionales,
como problemas económicos o fuerza mayor, es recomendable buscar asesoramiento
legal para determinar las mejores acciones a seguir y proteger los derechos de
la marca en el futuro .